25 marzo 2006

the rincón pío sound. don benito


Inaugurar The Rincón Pío Sound Venue fue para nosotros mucho más que un honor. Que se hayan acordado de nosotros para estar presentes en la puesta en marcha de un local al servicio de la cultura sin ánimo de lucro es un halago que nos llena de felicidad.

Tocamos a las tres de la tarde entre muchas caras amigas y mucha gente que sabe que la cultura, como todo en esta vida, es cuestión de trabajar y fomentar aquello en lo que uno cree.

The Rincón Pío Sound no sólo es un local de conciertos de Don Benito, Badajoz, es un lugar en el que además se celebran exposiciones de pintura, escultura o fotografía, y en el que se proyectarán películas fuera de los circuitos comerciales y de la premura efímera de los estrenos.

No son unos recién llegados: ya han organizado conciertos de Starmarket, Lukestar, Logh, Engine Down, This Ain't Vegas, Ipanema, 12twelve y muchos otros con una profesionalidad y un entusiasmo que, sin duda, creará escuela.

Gracias amigos del Rincón Pío Sound, fue/será el concierto más inolvidable de nuestra vida.

fotografía: Roberto Álvarez

24 marzo 2006

bad-music.com

Tercer disco de la banda extremeña e ideario intelectual de un grupo en pleno proceso de metamorfosis ideológica, lo que hace de este disco un trabajo complicado y bello a la vez. Abandonando las armas con las que trabajaron antaño, marchan a escape hacia un futuro más interesante desde el punto de vista musical, desconcertante comercialmente y muy atractivo para el egoista oyente.

Dejar de lado el inglés nos permite descubrir una banda con ideas, cosas que contar y que utiliza las palabras como arma arrojadiza para, entre estribillos y acordes, provocar un toque de atención a tanta frustración ahogada en botellones de fin de semana. Abandonar la violencia les convierte en mucho más peligrosos, ya que utilizando las palabras y desarrollando las ideas son más cortantes, virulentos y punzantes, penetran más en el interior y desde allí estallan en mil pedazos.


Madurez? no lo sé, pero si así fuera, bienvenida sea. Compromiso? lo desconozco, pero de ser así, ya era hora. Revolución? quizás es muy pronto, pero siempre hay que estar preparado para ella.


Entre la elegancia de Elvis Costello y la desfachatez juvenil de Nada Surf, hay un hueco por el que se mueven a sus anchas Bloomington, con 36 minutos de sonido indie-rock con ideas... y no todo el mundo está preparado para ello.

Redactor: Jose Luis Bad

23 marzo 2006

heineken.es

Bloomington se forman en Cáceres en el año 1994. Fieles a una filosofía de trabajo cercana a los postulados del D.I.Y. y celosos de una independencia que no quieren vender al mejor postor, el grupo dedica los primeros años de su existencia a la creación de canciones y su exposición en directo a todo aquel interesado.

Razón por la que se montan su propio estudio de grabación (Tribal Secret), desde el que en el año 98 lanzan la primera de las cuatro maquetas con las que empiezan a llamar la atención de discográficas y público, gracias a un sonido que tiene sus referentes al otro lado del Atlántico.

Del emo al college-rock, filtrando influencias de Sonic Youth y Sunny Day Real Estate, de los pasajes acústicos a las guitarras afiladas, acudiendo a la psicodelia cuando es necesario o dejando que los instrumentos hablen por si solos sin necesidad de voces que les acompañen en unas letras que, por entonces, se escribían en inglés.

Con la llegada del nuevo siglo, Bloomington debutan en formato largo optando por la autoedición. The Magic Bullet Theory (Indie-Rock Action, 00) les abre nuevas puertas y les permite entrar en contacto con Aloud Music, sello en el que publican su segundo LP: Kill The Rock Stars We Were (Aloud, 03).

Tres años después regresan con Activando La Disidencia (Aloud, 06), álbum producido por ellos mismos y mezclado por ese genio a pequeña escala llamado Santi García (habitual productor de la factoría B-Core). Un disco que supone su definitivo paso al castellano y en el que parecen alejarse un tanto del indie para acercarse a un rock sin aditivos.

Activando La Disidencia tiene en unas melodías intensas y un sonido directo y desnudo obtenido con los mínimos elemento definitivo paso al castellano y en el que parecen alejarse un tanto del indie para acercarse a un rock sin aditivos.

Activando La Disidencia tiene en unas melodías intensas y un sonido directo y desnudo obtenido con los mínimos elementos posibles, el nexo de unión entre nueve canciones que, con títulos que hacen referencia a tiendas de discos convertidas en grandes almacenes (Madrid Rock), míticos combates de boxeo (Cuando Fuimos Reyes) o los grandes ogros del siglo XXI (La Corporación), se convierten en nueve metáforas de nuestra sociedad.

Unas letras de doble fondo que, bajo una apariencia de denuncia política y social, esconden problemáticas mucho más cercanas, cotidianas y personales.

Zigor Cavero

20 marzo 2006

thebellemusic.com

¿Hacia donde mira el chico de la gorra que figura en la portada del disco de Bloomington?,o en todo caso ¿Qué se quiere negar a ver? El problema cuando quieres decir mucho es que si no tienes claro el discurso el tiro te puede salir por la culata, te puedes volver soso y aburrido. Los folletos desplegables que se incluyen en algunos discos casi nunca dicen nada, se hacen innecesarios y -siendo prácticos- ponerlos dentro de la caja nuevamente es un coñazo. Los discos conceptuales -la mayoría de ellos- tienen bien ganados el calificativo de "infumables" como norma de descripción. Hasta ahí bien... o bastante mal, vamos. El caso es que Activando la disidencia -el primer disco de los de Cáceres en español- podría muy bien terminar contradiciendo todo lo malo que le acabo de achacar a este tipo de trabajos.

Desde "Empezar otra vez" hasta "lear" los Bloomington parecen desarrollar una especie de obra de teatro con sus divisiones en actos, y lo que me parece más interesante es que tanto música como diálogos se hacen complementarios hasta el punto en que, como la escena cumbre de una obra, cuando la voz calla, son los instrumentos los que parecen seguir desarrollando la historia (si es que la hay) ya sea con guitarras rítmicas de un pop bastante clásico, pero motivante, o bajos y baterías trotones que funcionan de maravilla en canciones como "la corporación", hit innegable de este disco. Podría citar a muchas bandas que transitan los caminos que aquí hacen acto de presencia, pero como dicen ellos mismos en "Madrid Rock" se tienen que dejar de lado las explicaciones... Al menos las que llevan a un tópico tan manoseado como el de las "influencias", vale la pena llegar al plástico sin anticipar "otros nombres".

No es necesario enchufar demasiada distorsión y gritar con fuerza para llamar la atención, se trata de tener canciones de calidad, canciones que funcionen sin disfraz y en el caso de Bloomington todas ellas parecen estar sacadas de raíz, cosechadas sin químicos. A este paquete de melodías se les ha protegido de la lluvia ácida que pudiera derretirlas. Probablemente a primera escucha quede la sensación de que la banda tiñe sus canciones de cierto aire político, cierto tufillo trasgresor light pero no se engañen, mientras más gire "activando la disidencia" más trucos y artilugios se van apareciendo en el camino y cualquier aire "trascendental aburrido" se quiebra a favor de la música y de las canciones.

Los edificios ciertamente representan ese aire vacío que respira el arte de este disco; pero son, acompañantes como estos, los que llenan ese vacío inmobiliario y sentimental en el que probablemente tengamos que vivir muchos años, los que convierten nuestras habitaciones en hermosos campos de batalla.

PD: se agradece la inclusión de un folleto con las letras de las canciones, vale la pena el trabajo que da volverlo a poner en su respectivo lugar.

por Jorge Paez

18 marzo 2006

ociojoven.com

Desde hace unos años que Bloomington son, más que una banda, unos auténticos catalizadores de la escena indie-rock nacional, aunque siempre han sido un poco los hermanos pobres de otras bandas, sin obtener el reconocimiento del que otras bandas de grandes ciudades disfrutan. En este caso y como viene siendo tendencia, los cacereños se han pasado al castellano resultando en un curioso timbre de voz un tanto ambiguo con tendencia a exagerar las "eses". Esto permite que las historias de desesperanza tanto sentimental como sociopolítica nos atraviesen con más fuerza, así como los alegatos que llaman a cambiar el futuro, a "activar la disidencia" como reza el álbum inspirado en un texto de Chomsky.

La pauta del disco es la tensión instrumental agudizada con letras disturbantes. Así comienza con trepidancia percusiva "Empezar otra vez" que enlaza a la perfección con "No todo está perdido". Esto ilustra el carácter unitario de un disco breve (35 minutos) y con escasos altibajos.

Pero la poesía de Bloomington habla de cosas muy concretas. El mejor caso lo tenemos en "Madrid Rock", una especie de oda a la música a modo de desoladora crónica futurista, o quizás no tanto. El tono tristón y amargo con su punto de fuga continúa en "Cuando Fuimos Reyes" y se remonta el vuelo un poco con la reflexiva "Redactor Jefe".

El disco también nos ofrece números dignos del mejor pop-rock como "Lugares Comunes" o especialmente "La corporación" con pegadizos estribillos que obsesionan la mente del oyente. Una conjunción tan perfecta tiene esta última entre fuerza lírica e instrumental que no sabrás si la escuchas por el puro placer de oírla o para aprenderte la letra. Letras remarcadas con la reiteración rítmica y que alcanza grandes cotas como en "Trenes Rigurosamente Vigilados".

En fin, Bloomington encuentran en su particular madurez un aliado en poderoso en el castellano para mostrar una rica expresividad que no necesita de grandes piruetas musicales más allá del indie-rock noventero y quizá algunos retazos de post-rock. Canciones volátiles que nos sobrevuelan como sueños y pesadillas a la vez exponentes de la cruda y grisácea realidad, sensaciones bien plasmadas en el artwork.
Por: Sprnknwn

16 marzo 2006

pinypondjs.com

Regreso del combo extremeño Bloomington con nuevo miembro en sus filas y con su primer trabajo en castellano, "Activando la disidencia" (título pillado de un documental canadiense sobre la figura de Noam Chomsky), LP que sirve de paso para inaugurar en el sello Aloud Music la sección "discos cantados en castellano". En lo que respecta al tránsito de lenguas aquí no hay falla (como en algunas sonadas escapadas al castellano de otros grupos y solistas) pues Bloomington se han currado con cariño las letras y parecen moverse con comodidad en la lengua de Cervantes. Tres discos (incluyendo éste) a sus espaldas y subiendo escalón tras escalón en la búsqueda de un sonido propio que parecen haber encauzado en este nuevo disco. Huida de los sonidos más contundentes y barrocos de "Kill the rock stars we were" (referencia más directa para unos servidores) con premeditación y alevosía, cosa que visto el resultado aplaudimos, pues aunque no es cuestión de renegar del pasado el autoinventarse y regenerarse indica que Bloomingtoon palpita. Exceptuando "La corporación", que relativamente parece buscar la urgencia como expresión, el resto del disco se mueve por aguas más o menos controladas y hasta intimistas. Titular al tema de inicio "Empezar otra vez" se nos antoja como algo no casual. Empieza una nueva singladura para los extremeños que en este trabajo queda patente canción a canción y que queda plasmada en temas acertados como "No todo está perdido", "Lugares comunes", la melancólica "Cuando fuimos reyes" o la tremebunda "Redactor jefe". Tienen tiempo hasta de jugar un poco a ser un poco de la escuela zaragozana (es decir, El Niño Gusano/Tachenko/La Costa Brava) en "Madrid Rock" (crónica en clave sobre el cierre de la tienda de discos madrileña). La pegadiza "Trenes rigurasemente vigilados", uno de nuestros temas favoritos, y un final atípico por su duración ("Lear") que esconde un bonito track sin nombre, rematan un disco que consigue desde su falta de preteciosidad y simplicidad de exponentes mantenernos enganchados.

14 marzo 2006

lafactoriadelritmo.com

Bloomington es un grupo de Cáceres, comenzó a existir en el año 1994, si bien no es hasta 1998 cuando registran sus primeras canciones en una maqueta, además de incluir una canción en un recopilatorio para Subterfuge.

Con aquella grabación comienzan a sonar en Radio 3 y un año después registran dos nuevas maquetas. Las cuales son bien acogida por público y crítica. En el 2000 graban otra nueva maqueta con similar respuesta.

En el 2001 deciden grabar su primer disco en formato profesional, "The Magic Bullet Theory", que se publicaa en febrero del año siguiente de forma autoproducida y en el que se aprecia el universo musical de la banda... Pixies, Sonic Youth, Pavement, Guide by Voices y otros muchos. Con letras en ingles.

Dos años después lanzan "Kill the rock star we were", disco que se publica con el recién nacido sello "Aloud Music". Aquel disco fue muy bien recibido por la crítica y mostraba su capacidad para sonar elegantes, con un pie en las bandas que les inspiraron en un principio y otro en sus propia forma de ver la música.

Ahora, recien nacido el año 2006, Bloomington lanza un nuevo disco, "Activado la disidencia", en el que apuestan por el castellano para las letras y en el que arriesgan dentro de la coherencia de su estilo indie-rock.

El grupo está compuesto por Javier Torres, bajo, Juan Jesús, batería, Carlos Rubio, guitarra, y José Tato, guitarra y voz, quien contesta a nuestras pregunta sobre la banda:

• "Activando la disidencia" es vuestro tercer trabajo, con una gran novedad... cantar en español. De eso ya hablaremos después, pero antes... ¿Vuestros discos son pasos en un mismo camino o notáis importantes rupturas de cada uno al siguiente?

Son pasos en un mismo camino, etapas que se van sucediendo de manera natural. No buscamos romper con lo que hemos hecho antes, sólo intentamos continuar un camino emprendido hace tiempo y que tiene que seguir evolucionando. La evolución supone dejar atrás lo caminado, aunque sin acritud.

• Y el grupo como concepto y proyecto... ¿notáis que maduráis con el paso del tiempo... con cada disco y con la suma de actuaciones en vuestro haber?

Ahora somos más maduros, no sólo como grupo, también como personas. Cada grabación hace que aprendas cosas nuevas y cada actuación hace que seas más fuerte y estés más seguro de lo que haces. Con el paso del tiempo uno va perdiendo inseguridades y aprende a respetarse.

• Respecto al cambio del inglés por el español... ¿por qué este cambio tan importante?

Cuando el grupo nació, éramos adolescentes y, por lo tanto, no nos planteamos nada referente a tocar en una banda de rock: hicimos lo que haan en ese momento lo grupos que nos gustaban. Cuando muchos años después nos planteamos por qué cantábamos en inglés no encontramos ninguna razón de peso, y comprendimos que era un obstáculo entre la gente que nos escucha y nosotros. No nos arrepentimos de haber cantando en inglés, pero ahora sabemos que deberíamos haber cantando en español mucho antes.

• ¿Ha resultado más difícil componer las letras en castellano que en inglés?

En español es mucho más difícil, porque es nuestro idioma y el idioma de la mayoría de gente que nos escucha, y no nos sirve cualquier cosa, como sucedía en inglés, a pesar de que éramos muy cuidadosos con nuestras letras en inglés. En español hemos evitado las rimas agudas y los estribillos, y hemos buscado que las canciones sean lo suficientemente abiertas como para que puedan ser interpretadas de muchas maneras.

• Vuestro primer disco lo auto-editasteis, pero vuestros dos últimos trabajos han sido publicados por Aloud Music. Además "Kill the rock stars we were" fue la referencia que estrenó el sello... ¿Qué tal con Aloud Music? ¿Aporta lo que vuestro grupo necesita?

Sin Aloud no podamos existir. Ellos son parte de nosotros, son una parte más de la banda. Nos apoyan, nos entienden y nos esperan (hemos tardado más de año y medio en componer y grabar el disco). La industria musical y cultural de este país sería distinta si todos los sellos fueran tan honestos, soñadores y trabajadores como Aloud Music.

• Vuestro anterior disco se distribuyó en algunos países extranjeros... ¿se lograron vender muchos discos en esos países?

No se vendieron muchas copias, pero la acogida en la prensa fue muy buena, sobre todo en Alemania e Italia.

• ¿Se distribuirá el nuevo trabajo también en otros países?

Seguro que sí.

• Por cierto... ¿Cómo está el panorama musical en Cáceres? ¿Tenéis seguidores en vuestra tierra?

No conocemos a todos los grupos de Cáceres, y suponemos que debe de haber mucho más de lo que parece. Hay bandas con una buena trayectoria como Maggot Brain, y mucha gente con ganas de hacer cosas como en todos los sitios.

Tenemos seguidores, por supuesto, y para muchos de ellos ya somos como parte de sus vidas: llevan catorce años viéndonos tocar y comprando nuestros discos.

• ¿Qué grupos de Extremadura nos podéis recomendar?

Maggot Brain.

• ¿Y qué grupos a escala nacional os gustan?

(lo:muêso), Peluze, Nothink, Raydibaum, Standstill, 12twelve, Ainara Legardon,...

• Y ya a escala mundial... ¿hay bandas que os hayan aportado algo especial y os hayan influido?

Fugazi, Cursive, The Appleseed Cast, At the drive-in, Q and not U, Low, Uncle Tupelo, ...

• ¿Qué os gustaa conseguir con "Activando la disidencia"?

Nos gustaa que la gente disfrutara con él.

• ¿Tenéis ya proyectada una gira de presentación?

BloomingtonSí. No será una gira al uso, pero tocaremos en muchas salas de España a lo largo de los próximos meses, además de tocar en algunos festivales de verano como Contempopranea.

• Y nada más, salvo dejaros espacio para si deseáis añadir algo más...

"All the power's in the hands/ Of people rich enough to buy it" (The Clash).

texto: F-MHop

08 marzo 2006

desconcierto.com

Por mucho que se le intente quitar importancia, lo cierto es que en el último año y medio son ya varios (y sonados) los casos de grupos que deciden abrazar su lengua natal tras flirtear en varios discos con el inglés. Estoy de acuerdo en que ello nos permite a los oyentes juzgar con más criterio el trabajo de ciertos artistas, pero a algunos les ha salido el tiro por la culata. Y así llega el tercer trabajo de Bloomington, con la duda de si saber lo que dicen (el inglés de muchos de nosotros es lo suficientemente malo como para sólo entender algún "alone" o "pain" entre los guachu guachus) redundará en la imagen (buena) que tenemos del grupo.

Pero Bloomington son una banda con ganas de contarnos cosas y de hacerse oír, y el propio título del álbum y de las canciones defienden esta idea: "Madrid Rock", "La Corporación", "Trenes rigurosamente vigilados"... E inevitablemente, sobre todo en las primeras escuchas, tiendes a centrar tu atención en las letras densas, un tanto amargas aunque de conclusiones optimistas y que denuncian y acusan, pero sin caer en la evidencia, haciendo necesario leer entre lineas. El sonido del cuarteto (después de publicar su segundo disco incorporaron a Carlos Rubio como segundo guitarrista) se ha tornado un poco más reposado desde aquel primer álbum, "The Magic Bullet Theory", dejando a un lado los guitarrazos más salvajes, sonando más limpios y contenidos, logrando que las canciones se enlacen unas con otras de forma que se reflejen en un trabajo homogéneo y que transcurre con gran fluidez, aunque eso no resta mérito a temas como "Lugares Comunes" y las anteriormente citadas, como "La Corporación", bailable y rabiosa, ofreciendo así los momentos más intensos y que terminan dibujando un cielo nublado y una ciudad gris. Indie-rock que huele a una ciudad contaminada, pero que deja abierta una ventana a la esperanza.

Texto: Sergio M.

02 marzo 2006

eramagazine.net

Tercer disco de Bloomington y primero en castellano. ¿El motivo? Se lo tendremos que preguntar a ellos, pero lo que es claro es que su mensaje llega más claramente. No hay que escuchar más que la canción “Madrid Rock” para darse uno cuenta. ¿Pero es un discurso combativo o hay dobles intenciones en las letras? Eso corresponde a cada uno cuando escuche el disco. En lo musical, nos encontramos con melodías elegantes sin artificios, sin decoración exterior, donde se aprecia una influencia del indie rock de los noventa. El resultado es más que satisfactorio. En este tercer trabajo se puede comprobar cómo los grupos evolucionan con el tiempo. Y Bloomington lo ha hecho y muy bien.

/LLUC VENTURA/

notesalves.com

Activando la disidencia es el título del tercer trabajo de Bloomington recientemente publicado por Aloud Music Ltd. Un título para un disco que pretende no dejar indiferente al que lo escucha y que se presenta como un punto de inflexión en la carrera de la banda extremeña. Un nuevo comienzo, un nuevo planteamiento, un nuevo viaje que queremos descubrir y en el que merece la pena profundizar para ayudar a despertar a esa voz dormida.

Empezar otra vez
Comenzar de nuevo implica haber dejado algo. Hace poco hablábamos con Abel Hernandez sobre la muerte de Migala y el nacimiento de su nuevo proyecto, El Hijo. Hablamos de "muerte" porque dejar algo impone también un cierto grado de dolor. ¿Qué ha dejado Bloomignton para que naciera “Activando la disidencia”?

Empezar otra vez viene de la idea de que todo lo que habíamos hecho ya no servía. Era intentar iniciar un camino nuevo, de ahí lo de meter a alguien más en el grupo pero, sobre todo, intentar que las canciones no fueran las mismas. Antes de este disco compusimos otro en inglés que al final no fuimos a grabarlo. Lo habíamos maquetado y estaba terminado para haberlo grabado pero nos dimos cuenta que era justamente igual a los otros que habíamos hecho… Fue cuando dijimos: “tenemos que cambiar, no hacer otra vez lo mismo”. No sé si matar lo antiguo. No sé si al final hemos conseguido hacerlo, pero creo que la impresión que tenemos nosotros es que sí hemos hecho algo distinto. No sé cómo se verá desde fuera, pero las estructuras de las canciones, la forma de hacerlas, sin incidir mucho en los estribillos, que sean canciones que empiecen y terminen, sin que haya muchas repeticiones… Creo que quizás eso sea lo de empezar otra vez. Y luego, por supuesto, lo de cambiar de idioma, que tiene también mucha relación con el titulo del disco. Lo de activando la disidencia y plantearse por qué hacer las cosas. A veces, sobre todo en proyectos como éste que se inician en la adolescencia y que no están muy madurados, lo haces un poco por la inercia de lo que escuchas… Pues quizás llega el momento de plantearse por qué haces esto, es entonces cuando te tienes que plantear por qué canto en inglés y, claro, argumentos sólidos por los que un grupo de Cáceres cante en inglés, no hay. Y si no hay argumentos entonces eso lleva a un nuevo inicio.

Este año que termina ha supuesto que muchas bandas que tradicionalmente cantaban en inglés pasaran a cantar en castellano. ¿Cuándo o que ocurrió para que las canciones y vuestro tipo de música empezaran a ser creíbles en ese idioma?

Para mí, sobre todo, fue el disco de Standstill. Me ayudó muchísimo. Fue quizás el primer grupo que nos gustaba, y que escuchábamos mucho, que se atreviera a dar el paso… Lo escuchamos con mucha atención, era un grupo que nos merecía respeto, aunque quizás la forma de enfocar las letras que tienen ellos a mí no me convencía mucho. Porque son unas letras que, leídas son estupendas, pero luego, con la música, a mí no me acaba de encajar. Nosotros hemos intentado justo lo contrario, son letras construidas para ser cantadas, para que se ajusten al ritmo de la canción. Por eso, si las lees no tienen mucho sentido, al menos a mi a veces me da esa sensación. Sin embargo, también me da la sensación de que sí que funcionan cuando se escuchan dentro de la canción. Quizás eso fue algo que ayudó a dar el paso, pero el paso, como te he comentado antes, se produce cuando nos preguntamos por qué cantamos en inglés. Eso nos llevó a plantearnos por qué utilizamos pedales de distorsión, aunque ahora hemos vuelto a utilizarlos... Pues todo es por la misma razón: porque nos dimos cuenta que eran necesarios.
Con el inglés hubo un momento que descubrimos que no era necesario y que era mucho más interesante cantar en castellano para lo que el grupo quería hacer, que era transmitir una serie de sensaciones, sentimientos y demás a un publico, que es un público español. Es verdad que también hemos vendido discos en el extranjero pero es algo muy anecdótico. Las ventas en el extranjero pueden suponer 30 ó 40 discos. Realmente el público que nos ve y que nos sigue es publico español, habla nuestra lengua y para nosotros es mucho más fácil expresarnos en español. Aunque las letras han sido mucho más elaboradas, porque había que intentar hacerlas para que tuvieran ese nivel de calidad que nosotros creemos necesario.

Tradicionalmente vuestra página siempre ha estado publicada en castellano e inglés. ¿El cambio de idioma supone rechazar de alguna manera el mercado internacional?

No, pero al comprobar las visitas que teníamos y demás, nos dimos cuenta de que casi todo el mundo que nos sigue es español. La manteníamos en inglés y tenía su sentido en un principio, pero ahora ya no tiene mucho sentido. Y es verdad que si a alguien le sigue atrayendo nuestra música y no entiende el español, pues puede seguir escuchándola exactamente igual de todas formas. En la página vamos tendiendo a dar menos información, a que ésta sea mucho más concreta. Es una de las cosas que hemos aprendido con el paso del tiempo. Internet tiene muchísima información, pero la gente busca algo rápido, muy concreto y corto. Y es lo que creo que estamos intentando ahora.

Dentro de este nuevo espacio construido, ¿era necesaria la incorporación de un nuevo miembro?

Lo del nuevo miembro fue antes del cambio y fue porque, sobre todo, la parte final de la gira del segundo disco fue físicamente agotadora, no sólo por los viajes y demás, sino porque las actuaciones eran extenuantes. Yo tengo un recuerdo nítido de muchos finales de actuación, de vernos tirados en el suelo de los camerinos completamente reventados… Nos dimos cuenta de que era demasiado trabajo para tres personas… Desde que incorporamos al nuevo miembro, el desarrollo posterior de las canciones ha hecho que ahora sean mucho más relajadas, mucho más tranquilas, no tan intensas como las del segundo disco… A lo mejor, la idea inicial de incorporar un segundo guitarrista para repartir mejor el trabajo, ahora ya no tendría sentido, pero sí es verdad que su entrada en el grupo ha servido para que las miras se amplíen bastante, que la forma de componer sea mucho mas rica y más abierta, aunque hemos buscado en todo momento la sencillez.

No todo está perdido
Esta canción parece toda una declaración de intenciones de lo que es el disco: "buscar las palabras que activen de nuevo las voces robadas a nuestro silencio". En estos tiempos cualquier tipo de expresión cultural parece condenada al fracaso ¿Qué te hace pensar que no todo está perdido?

Nosotros seguimos creyendo en el ser humano. Si miramos a nuestro alrededor, la mayoría de la gente que nos rodea es gente buena. Es verdad que si vemos la televisión nos puede dar la impresión de que vivimos rodeados de asesinos y de violencia. Es verdad que hay violencia, a nuestro alrededor también la vemos, pero la mayoría de la gente no es así.
El problema es que tenemos que creernos esto y precisamente desde los medios de comunicación hace poco leía que ahora estamos en un momento en el que la sensación de inseguridad ciudadana es extrema, que cada vez hay más muertos, más robos … Sin embargo, salió el otro día un informe del Ministerio del Interior diciendo que la delincuencia había bajado un montón de puntos… o sea, que hay algo que no funciona, si cada vez hay menos delitos, ¿cómo es posible que tengamos la sensación de que hay muchos más, y también la sensación que tenemos de que todo el mundo es traidor o que todo el mundo hace cualquier cosa por dinero y que te traiciona?… en realidad yo creo que tampoco es así, que no todo el mundo hace las cosas por dinero, que todavía hay mucha gente que hace las cosas porque quiere y que no vende a su padre por dinero. A mí me da esa impresión y de hecho de eso habla esta canción. También es verdad que es la segunda canción del disco y en el disco hemos intentado que todas las canciones tengan una relación. En realidad el propósito era que todo el disco fuera una historia. Se puede leer el disco como una historia y también se puede leer cada canción por separado, una historia con múltiples lecturas, pero en esta canción queríamos destacar sobre todo eso.

En esa declaración de intenciones y dejando a un lado el significado etimológico de cada palabra perfectamente explicado en vuestro diario, creo que ni Bloomington es el típico grupo de rock ni "Activando la disidencia un disco de normal", ¿no es así?

Sí, bueno... Nosotros, desde el principio, teníamos ese planteamiento, sin caer en el elitismo ni nada. Hemos creído que el rock es una forma de expresión artística y como tal hemos creído que un grupo de rock tiene que ser otra cosa, tiene que ser ruido, velocidad, pero también puede ser otras más y, de hecho, hay múltiples ejemplos de grupos que han sido algo más que sólo un grupo de rock. Es verdad que en este disco queda más claro. Está en español, se entiende porque todo es mucho más sencillo, porque te da la impresión de que todo está hecho con mucha más intención, porque se comprende mejor o al menos esa es la sensación que tenemos ahora con la gente que ya lo ha escuchado… Quizás también es un disco maduro, nosotros ya tenemos una edad, llevamos 12 años en el grupo, entonces ya hemos visto mucho, hemos visto modas, hemos visto grupos muy buenos que al año ya no existían, hemos visto muchísimas cosas… Y esa perspectiva del tiempo te hace ver l rock de otra forma… Estaríamos más cerca de un grupo como Superchunk, del que recuerdo una entrevista de hace muchísimos años en la que ellos decían que cuando iban a tocar de gira no se emborrachaban porque preferían levantarse al día siguiente en la cuidad que estuvieran y ver cómo era, visitar los museos que hubiera… Yo creo que estamos más cerca de grupos con esa filosofía del rock, donde se incluye el rock, pero que también incluye los museos y los bares, por supuesto, y beber, que no está reñido, pero no el rock como algo marginal fuera del arte sino como algo que está dentro del mundo del arte.

Lugares comunes
Hace unos años era la posibilidad de perder la vida o de ir a la cárcel, hoy puede ser la pérdida de tu trabajo. ¿Sigue existiendo ese miedo a señalar lo que corresponde? ¿sigue estando la sociedad atenazada por el miedo?

Esa es la idea de esta canción: cómo el miedo nos sigue atenazando, el miedo a perder lo que tenemos, y cómo ese miedo inculcado en cada uno de nosotros hace que no podamos movernos. Porque, en realidad, los que tenemos el poder somos nosotros, o sea, es algo absurdo y prefabricado de tal manera que funciona a la perfección, es algo realmente alucinante. Pero nosotros hemos llegado ya a un momento en que no tenemos miedo a nada realmente, y no quiero que esto suene a petulancia ni nada parecido, pero es verdad que nosotros llevamos ya una trayectoria, que quizás al principio sí que teníamos un poco más de miedo a la reacción de los demás, de hecho el primer disco no fue bien acogido y nos sentimos muy mal y muy molestos; pero ahora mismo, no es que nos dé igual, pero cuando tú haces o compones un disco o un poema o cualquier cosa quieres que llegue a la gente y que la gente lo entienda y que le guste y que disfrute… Pero si no gusta, pues bueno, nosotros lo hemos hecho con nuestra mejor intención, nosotros sentimos eso y queremos transmitirlo y si hay gente que le gusta fenomenal, sería maravilloso... pero si a la gente no le gusta, pues nada.

Madrid Rock
Dicen que la música está muerta y este otoño en Madrid había más de cinco conciertos por día. Dicen que a la gente no le interesa la música y se abren salas de conciertos. Dicen que no vendían suficientes discos, pero Madrid Rock estaba siempre llena y había que hacer una cola enorme siempre para pagar… ¿no hay una cierta hipocresía en todo esto? ¿a quien deberíamos creer?

Yo no sé muy bien a quien creer. Sí es verdad que esta canción habla de Madrid Rock, pero habla de muchas otras cosas. Es verdad que la canción estaba ya compuesta antes de que pasara lo de Madrid Rock y que cuando nos dimos cuenta de lo que estaba pasando, pensamos que esta canción se tenía que llamar así. Por todo lo que representa, por lo que representaba en Madrid, para todos los españoles, por lo que representa al rock para gran parte de nosotros y por lo que representaba esa tienda de discos…
Todos hemos ido a esa tienda y hemos alucinado viendo un sitio donde había tantísimos discos y discos. Además, que para personas que nos gusta la música, mirabas y encontrabas cosas sorprendentes… Todo lo que ha rodeado a la venta de Madrid Rock y el trato con los trabajadores… todo por el dinero, un poco de lo que hablábamos antes, es una sensación además de que hay mucha gente que lo apoya... Porque aquí parece que se esta poniendo sobre la mesa o estamos enjuiciando a un señor que es dueño de una tienda y la quiere vender. Eso nadie lo enjuicia. El problema es que para hacer eso, que es legítimo, tú tienes una tienda y la quieres vender, pues véndela; pero si para hacer eso lo que has hecho es declarar en ruina el negocio, despedir a sus trabajadores, dejándoles en la calle sin pagarles lo que les tendría que pagar… Y luego encima saca un manifiesto diciendo que lo cerraba por la piratería, bien, incluyendo en la piratería, no sólo al top manta, que es verdad que eso sí es piratería, comerciar con el trabajo de los demás y venderlo; pero también incluye los programas de intercambio de música en Internet, que todos sabemos que eso no es piratería, o al menos no es la piratería que ellos quieren hacernos creer.
Creemos que Madrid Rock es un ejemplo de lo que está pasando ahora mismo y lo que es peor, es un ejemplo tan duro, que a la gente se le olvida que esto pasa y pasa constantemente y aquí no pasa nada, todos los demás seguimos andando… Hay siete, ocho, nueve o diez trabajadores, no recuerdo los que eran, que los han despedido, los han dejado en la calle y ya está... no pasa nada, no nos ha tocado a nosotros, así que no nos importa… Madrid sigue funcionando y el rock sigue funcionando y seguirá haciéndolo mientras haya gente con ilusiones y que haga las cosas todavía no por dinero como este señor... estamos hablando de que si lo hubiera hecho de otra forma podría haber perdido 100 millones cuando imagino que habrá ganado miles de millones por vender ese local en la Gran Vía, y 100 millones más o menos cuando no tienes nada es mucho, pero cuando tienes miles de millones no es nada… Y podría haberlo hecho así y nosotros deberíamos haberle exigido que lo hubiera hecho así... y cuando digo "nosotros" me refiero a la sociedad en su conjunto.

Cuando fuimos reyes
Esta canción es mi favorita porque representa musicalmente la nostalgia. Nunca olvidaré la película de Fernando León, "Princesas", cuando Candela Peña dice que nunca había sentido nostalgia porque nunca le había pasado algo tan bueno como para sentir nostalgia. Sin embargo cuando soñaba le pasaban cosas buenas y entonces sentía nostalgia de eso que soñaba… ¿se puede tener nostalgia de algo que no te ha ocurrido?

Con esta canción y con tu interpretación son estas cosas que a mí me encanta, que tú sientas eso y que puedas interpretarlo... porque la idea de este disco era hacerlo muy abierto y que todo el mundo pudiera sacar las conclusiones que quisiera de ello. Precisamente, "Activando la disidencia" es eso, activarla. Nosotros sabemos hacer preguntas pero no sabemos las respuestas. "Cuando fuimos reyes" es una película documental que habla del combate en Zaire de Mohamed Ali y George Foreman. Nosotros somos, te diría, aficionados al boxeo, aficionados, sobre todo, a Ali. Ali para nosotros es un mito, es un ejemplo de lo que todos deberíamos ser, con todas sus sombras y con todas sus luces… Toda la historia de Ali es maravillosa, es una historia épica, es el Ulises de nuestros días, por su condición de negro, por su condición de personaje importante que tiene todo el poder y lo pierde, por sus ideas, con las que podemos estar de acuerdo o no, pero alguien que se atreve a hacer eso… En "Cuando fuimos reyes" se ve cómo en el combate de Kinshasa gana la pelea... todo eso es mítico, de eso habla esta canción... eso creemos nosotros, pero también habla de lo que tú dices y de muchas otros cosas.
En realidad, al final, el último verso, es eso... "vienen días sin inviernos / algún día tendremos que vivir todos felices y sin inviernos / y ya no tiene que hacer frío como cuando fuimos reyes"… No sé, es muy difícil explicar las canciones cuando sobre todo porque nosotros lo que buscamos es que cada uno la interprete, que cada uno la haga suya…
Hemos visto, y aquí no es reproche, no nos sentimos avergonzados de los discos anteriores, que esto pasa desde que hemos hecho el disco en español... en inglés no nos había pasado nunca, nos había pasado lo contrario, mucha gente nos decía ¿de qué habláis en las canciones? Es una sensación horrible de la que nos damos cuenta ahora. Ya digo que no nos arrepentimos de haberlo hecho, pero sí que somos conscientes de que si lo hubiéramos hecho antes, lo de cantar en español, hubiera sido mejor. La misma música pero en español hubiera sido mejor, hubiéramos podido comunicarnos mejor con la gente que nos sigue…

Redactor jefe
En estos tiempos, en los que resulta difícil saber quién dice la verdad o quién está mintiendo ¿piensas que las palabras han perdido credibilidad?

La verdad no la tiene nadie, nosotros tampoco, insisto… bueno, el título es muy explícito aunque fue el título lo que más nos costo poner, porque queríamos dejarlo más abierto, pero no lo encontrábamos… al final, "redactor jefe" se centra en concreto en alguien, no en alguien físico, pero sí en alguien, en una persona que tiene un determinado trabajo y que está obligada a escribir unas determinadas... y todos sabemos que viviendo en un país como este, que dependiendo para quien trabajes tienes que escribir una cosa u otra, la verdad no importa, Hay muchas cosas detrás de esta canción, la película "El gran carnaval", por ejemplo … pero también es el trabajo diario de cada uno, es volver a otro tema del que ya hemos hablado, el miedo a hacer las cosas, el miedo a decir "no", ese miedo que tenemos a perder algo que es nuestro. En el caso de un redactor jefe pues, lógicamente, si rompen con la línea editorial, que se llama así de una manera eufemística, pueden irse a la calle... entonces tienen que manufacturar la verdad, tienen que acomodarla a una situación concreta y que a ellos les interesa por motivos económicos... no hay otro motivo que éste… Y el problema, por eso nos centramos en redactor jefe, es que las decisiones que toman en estas redacciones afectan a muchas personas, a muchas personas que creen eso, que aún piensan que lo que dicen en la televisión es verdad o piensan que lo que dicen los periódicos es verdad y, así, nosotros asistimos a diario sobre todo en estos últimos años a cosas absolutamente alucinantes, gente que hace manifestaciones por cosas que no han pasado, o gente que pide que nos pongamos en contra de algo que no existe, aunque tú le preguntes a la gente y piense que sí existe… El tema candente del estatuto, por ejemplo... hay mucha gente convencida en España de que el estatuto es darle la independencia a Cataluña y en ningún momento se ha planteado eso... a lo mejor en un futuro o cuando sea, no lo sabemos... pero ahora, de momento, no se ha planteado y tener un problema de algo que todavía no se ha planteado es algo absurdo, es un trabajo absolutamente perdido e inútil…

La corporación
Esta canción parece que ha sido elegida como presentación o primer single del disco. ¿Es, quizás “La corporación” la canción que mejor representa a este trabajo?

La idea del disco es una historia contada en 9 canciones, es una historia muy cinematográfica y si tienes la suficiente paciencia y la imaginación suficiente se puede ver además cómo las canciones van encadenadas unas con otras... hay palabras que se repiten en una canción y que luego se repiten en la siguiente. Hay muchas palabras. Precisamente “palabra” se repite mucho, se hace mucha incidencia, porque creemos nosotros que hablando es mucho más sencillo todo, que uno habla y cuenta lo que cree y escucha a los demás.
La corporación está dentro de toda esa historia, pero también como canción independiente... es quizás la canción más inmediata, más redonda y de una idea más inmediata también. Se titula "La corporación" pero hay mucho más que eso... es una canción que se puede interpretar de muchísimas formas y creemos que es la canción que mejor representa el disco, aunque como te he dicho, el disco lo hemos creado como un todo y el disco se entiende mejor escuchándolo todo seguido. Ya comentamos que en Internet, como van las canciones cortadas, se produce una sensación extraña cuando lo escuchas, pero cuando escuchas el disco original, como va todo seguido, no hay ningún momento de silencio entre una canción y otra, van todas unidas… Dentro de eso, si tenemos que sacar algún capitulo importante de un libro, pues sería quizás la que creemos nosotros que mejor representa el espíritu del disco…

Trenes rigurosamente vigilados
El viaje en un tren sin saber dónde te lleva y sin saber si te has equivocado de dirección, es una pesadilla que me persigue y que ciertamente me trae al recuerdo esta canción.

Es verdad que esa idea flota ahí, es verdad que hay gente que me ha hablado de otras cosas escuchando esta canción. Esta canción, igual que todas, pero quizás ésta en un grado muy alto, es una canción que se puede entender de muchas maneras. Además hemos intentado que así sea. Pero el titulo “trenes rigurosamente vigilados” es el titulo de una película checoslovaca. En esa película sucede lo que cuenta esa canción. O sea, en realidad es contar lo que pasa en la película pero utilizando una serie de recursos de tópicos, de lugares comunes, de ideas que todos hemos tenido alguna vez y la representación del tren como el lugar que te lleva a alguna parte y, sobre todo, eso que tú dices, la sensación de "¿me he montado en el tren correcto o se me ha escapado el tren que yo tenía que coger y ahora me he quedado aquí en el anden completamente solitario? Es verdad que el que conozca la película puede ver la canción de una forma y el que no la conozca puede verla de otra distinta, porque además, "trenes rigurosamente vigilados" dentro de toda la parte política del disco pues tiene también su importancia, porque esos trenes eran trenes nazis alemanes que estaban en Checoslovaquia circulando en la II Guerra Mundial.

Lear
La música de esta canción me hace casi olvidar la letra, recordando esos paisajes sonoros con los que acostumbrabais a ofrecer en vuestros discos. Durante la composición de este último disco, ¿habéis dado mucho mayor peso al contenido a las letras o simplemente es una sensación de que ahora se entienden mucho mejor al estar en castellano? consistencia de guitarras, voz y mensaje más alto…

Era premeditado hacerlo más sencillo. Quizás las guitarras podían haber sonado un poco más fuertes pero creemos que funciona bien y que esa era la idea… lo de la voz un poco más alta y demás, esta ha sido la primera vez que nosotros no hemos intervenido para nada en la mezcla. Hemos mandado las pistas y lo han mezclado Santi Garcia y Xabi Navarro, sin nosotros decirles absolutamente nada. Ellos son profesionales. Es la primera vez que lo hemos hecho así y estamos muy contentos de haberlo hecho porque en el segundo disco, sobre todo, las mezclas las hicimos nosotros y, claro, nosotros no somos profesionales y desde dentro es muy difícil ver las cosas. Desde fuera se ven mucho mejor…
Por ejemplo, yo ahora sí que podría haber mezclado el segundo disco, pero entonces no lo podía mezclar. Cuando estás dentro del proyecto tú no ves el todo, tú ves partes, ves guitarras, voces, batería… ves partes pero no ves un todo. Desde fuera ves un todo, ves una canción, entonces en la canción tú sabes qué le conviene, esto o lo otro…
Hemos buscado por encima de todo la sencillez y es verdad que esta canción es quizás, por eso está la ultima a propósito, la que tiene un pasaje instrumental más largo aunque mucho más sencillo que los paisajes instrumentales de otros discos, que eran mucho más elaborados, con más partes, con más ruido... este es mucho más sencillo y la incorporación del nuevo guitarrista ha servido también para darle algún matiz más, pero no para darle más contundencia, aunque es verdad que en directo sí que sonamos más contundentes... pura lógica.

Incluso cuando parece que el disco ha acabado aparece una canción escondida…

Como hemos hablado ya, hay muchos títulos de películas en los títulos de las canciones y un poco la idea era esa, hacer una especie de película... entonces no deben faltar los títulos de crédito. La idea de la canción escondida era tener los títulos de crédito, que también aparecieran, que tuvieran algo que decir... esa es la idea de esa canción…

No se pierdan Activando la disidencia por Bloomington.

texto: Javitxu.

01 marzo 2006

contempopranea 2006

Después de algunos años volvemos a tocar en el festival contempopranea. El festival se celebrará entre los días 28 y el 29 de julio del 2006.

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